ACEITUNEROS
Andaluces de Jaén,
aceituneros altivos,
decidme en el alma: ¿quién,
quién levantó los olivos?
No los levantó la nada,
ni el dinero, ni el señor,
sino la tierra callada,
el trabajo y el sudor.
(creo que es profundamente injusta esta estrofa…
No los levantó la nada…
pero si el dinero y si el señor…
ni la tierra callada ni el trabajo ni el sudor…los olivos existen porque alguien se empecinó en que existieran…
de otra manera no me extrañaría nada que los hubieran hecho leña para barbacoas, como están haciendo con las encinas centenarias…
tengo que decir que no tengo fe en el pueblo, que son como las gaviotas, crueles, competitivos y despiadados…
no obstante tanto la poesía como las canciones versionadas de ella son preciosas…
pero ciertamente encierran mentira e injusticia…)
Unidos al agua pura
y a los planetas unidos,
los tres dieron la hermosura
de los troncos retorcidos.
Levántate, olivo cano,
dijeron al pie del viento.
Y el olivo alzó una mano
poderosa de cimiento.
Andaluces de Jaén,
aceituneros altivos,
decidme en el alma: ¿quién
amamantó los olivos?
(los olivos fueron amamantados por quien pagó para que lo hicieran…)
que si no se paga no veo yo que nadie cuide olivos...)
Vuestra sangre, vuestra vida,
no la del explotador
que se enriqueció en la herida
generosa del sudor.
(¿vuestra sangre, vuestra vida?...
¿explotador?...
¿Qué se enriqueció?...
¿generosa del sudor?... mas de lo mismo…
que no digo que no haya o no hubiera explotadores..
pero vamos…
ni explotadores tan malos, ni explotados tan buenos…
cada cosa en su justa medida…)
No la del terrateniente
que os sepultó en la pobreza,
que os pisoteó la frente,
que os redujo la cabeza.
(¿terrateniente?...
es costumbre en Andalucía que el padre reparta las tierras a partes iguales a todos sus hijos…
normalmente venden las tierras nada mas heredarlas y se quedan sin ellas…
esto no ocurre en otras comunidades…
¿a quien le venden las tierras?...
al terrateniente o al que quiere serlo…)
(Árboles que vuestro afán
consagró al centro del día
eran principio de un pan
que sólo el otro comía.)
(lo mismo de lo mismo…
¿Qué solo el otro comía?...
¿se alimentaban del aire entonces?...)
¡Cuántos siglos de aceituna,
los pies y las manos presos,
sol a sol y luna a luna,
pesan sobre vuestros huesos!
Andaluces de Jaén,
aceituneros altivos,
pregunta mi alma: ¿de quién,
de quién son estos olivos?
Jaén, levántate brava
sobre tus piedras lunares,
no vayas a ser esclava
con todos tus olivares.
(esta estrofa directamente me parece una llamada sublevarse…)
Dentro de la claridad
del aceite y sus aromas,
indican tu libertad
la libertad de tus lomas.
(en fin…
me parece que el poeta estaba completamente equivocado y profundamente equivocados quienes se creen sus equivocaciones, sus mentiras y sus soflamas…
la verdad en prosa es mas bonita que todas las mentiras en verso…)