Debería estar jugando en el parque y ya es madre. No es la única. En España el número de embarazos de menores de 15 años se ha disparado un 400%. Según el INE, 2010 acabará con más 800 partos de bebés con padres y madres menores de edad. En esta ocasión, la madre-niña de la polémica tiene sólo 10 años, es rumana, de etnia gitana y su propia madre la trajo al mundo con apenas 12. Al margen de sus costumbres, este caso ha puesto de relieve la realidad estadística. Las cifras sirven de revulsivo para la reflexión y el análisis: ¿Qué está fallando para que el número de madres-niñas se esté disparando?
“Es menor y tan menor, sólo tiene diez años”. Son las palabras de Micaela Navarro, la consejera de Bienestar Social de la Junta de Andalucía, la misma Junta que, en plena crisis económica, ha gastado 150.000 euros en repartir entre los más jóvenes 500.000 sobres de lubricante, 17.000 unidades de diques dentales –protectores para la práctica del sexo oral– y 2,5 millones de "preservativos extrafuertes” con sabor a fruta. La misma Junta que ha editado las guías de “Sexualidad” y “Anticonceptivos” para niños desde 12 años, sólo dos más que la madre-niña rumana. La misma que ofrece hasta un 20% de descuento a quienes presenten su Tarjeta Joven en las clínicas abortivas.
Hasta aquí todo es estadística. La valoración corre por cuenta de los expertos en medicina y educación, y su conclusión no deja de ser abrumadora: “La educación sexual hace agua, la educación sexual rompe aguas”.
Bernabé Tierno es psicólogo, pedagogo y escritor, ha publicado más de 50 libros especializados en la educación y los menores, para él, el gran problema educativo al que se enfrenta nuestra sociedad es que “se ha banalizado todo lo que tiene que ver con la sexualidad hasta tal punto que hay una permisividad total. La sexualidad es una maravilla, pero ha de estar encauzada. No se puede educar a los jóvenes dándoles sólo preservativos. No puedes echar gasolina al fuego y pensar que no va a arder”.
Según el reconocido psicólogo y pedagogo, “a nuestros jóvenes no les hablan de ternura, de amor, de respeto, de autocontrol, de educación, de sensibilidad. No se les transmite que nuestros actos tienen consecuencias y que las consecuencias se han de asumir. Nada de eso. Más bien todo lo contrario. Se les enseña y se les adoctrina justo al revés. Parece que cuanto más practiquen sexo, cuanto lo hagan con más gente, es como mucho mejor. Parece que ser progresista y moderno es como ser promiscuo y, ojo, porque si no estás a favor de sus tesis entonces te tachan de retrógrado”.
Recientemente, una profesora le contaba con impotencia a Bernabé Tierno cómo descubrió a un chaval de 14 años desnudo con otra joven practicando sexo en los baños del instituto. Cuando fue a reprenderles, le respondieron: “Eh, que yo cumplo las normas, ¿qué pasa?, tengo preservativo”. Un descaro y una chulería que –según relata- quedaron impunes y ante la que nada pudo hacer la profesora en cuestión.
Tras más de medio siglo de profesión, Tierno está convencido de que ahora mismo en España “interesa una sociedad manejable, con poco sentido crítico, embobada, una sociedad que pueda domesticarse y si alguien piensa, si alguien reflexiona o está lo suficientemente formado como para cuestionar estos y otros asuntos entonces le rechazan, le critican, no sirve según ellos. A todo esto, además, contribuye muchísimo el fenómeno de la televisión donde cualquier indocumentado opina sobre cualquier tema y se cree además con autoridad para hacerlo”.
Por televisión lo vio precisamente la Defensora del Pueblo en funciones, María Luisa Cava de Llano, que aún está “sobrecogida” ante el caso de la madre de 10 años y coincide con los expertos a la hora de hablar de un “problema de educación preventiva. Es muy bonito ser madre pero a la edad oportuna y en el momento oportuno”.
“Esto no es más que el peaje que vamos a pagar”
Para el Doctor en Medicina y Catedrático de Educación para la Salud de la Universidad Complutense de Madrid, Jesús Sánchez Martos, “cada decisión tiene un precio. Por ejemplo, si la esperanza de vida sube hay que aprender a convivir con mayores y a darles calidad de vida. Pues esto es igual. Estamos perdiendo el tren de la educación sexual y el aumento de embarazos de menores no es más que el peaje, lo que vamos a pagar por las políticas que se autodenominan avanzadas”.
Sánchez Martos apunta a una falta de corresponsabilidad absoluta “el colegio ha de formar pero los padres han de educar y esto no es más que la punta de un iceberg. Sí les digo que desde el punto de vista médico, una niña con diez años no está preparada ni médica, ni social, ni científica, ni psicológicamente para ser madre”.
Desde el punto de vista neurológico, está comprobado que si no se promueven valores como la ternura, la generosidad, el respeto, el esfuerzo, el trabajo o el autocontrol, las neuronas que se activan son las de la pasividad, la vaciedad, la estupidez, los instintos primarios y la falta de control. Redes neuronales que se extienden irremediablemente por todo el entramado de la sociedad.
Bernabé Tierno cree que a una sociedad que presume de ser tan avanzada lo mínimo que se la podría exigir es que sus políticas educativas estuvieran en manos de auténticos expertos. La bibliografía en este sentido es muy extensa "Mentes diferentes, aprendizajes diferentes”, del doctor Mel Levine, Licenciado en medicina por la Universidad de Harvard y Director del Clinical Center for the Study of Development; “La Educación inteligente” de Bernabé Tierno; “Cómo aprende el cerebro, las claves para la educación” de Sarah Blakemore, Neurocientífica investigadora de la Royal Society Dorothy Hodgkin en el Instituto de Neurociencia Cognitiva del University College de Londres… Ellos, y no los políticos de turno, deberían ser quienes realmente diseñaran las estrategias de la educación de nuestros menores. Es evidente que no está siendo así y lo demuestra la mejor de las pruebas: la realidad. Leido en elconfidencial.com