Las intenciones políticas de una parte de nacionalistas catalanes de conseguir la independencia, se puede decir que son legítimas, tanto si lo hacen por las buenas, como si lo hacen por las malas…
POR LAS BUENAS, deben de utilizar los cauces legales…
Deben de confiar en los cauces que la propia Constitución Española posee…
Eso garantiza no solo la legalidad sino que además garantiza la estabilidad de todo el proceso en el caso que se dé.
Y tendrá un final perfectamente previsible, conseguirán sus objetivos o no los conseguirán…
En cualquier caso el hacer las cosas por las buenas garantiza que la paz social no se verá nunca amenazada.
Para ser realista, aún así, puede quedar un rescoldo que desemboque en confrontación, paro muy lejana y sin el amparo de la legitimidad democrática…
POR LAS MALAS, utilizar referéndums o consultas, ilegales…
Acosar, como están acosando, al Estado, a los gobiernos, a los jueces y fiscales y a todo el que se oponga a sus pretensiones y por todos los medios…
Recurrir a la violencia física, eso es recurrir a la fuerza, arengar a los jóvenes, a las masas, incitarlos a la desobediencia, a la lucha armada…
Y también tendrá un resultado perfectamente previsible, de que incluso tenemos estadísticas...
Conseguirán sus objetivos o no los conseguirán…
En cualquier caso hacer las cosas por las malas, inevitablemente creará, como las está creando, tensiones…
La justicia tendrá que actuar…
Eso incluye, sanciones de todo tipo para los responsables, tanto civiles como penales…
Inhabilitaciones…
la aplicación del articulo 55 de la constitución…
Porque saltarse la democracia, no es hacer política…
y por fin llegado el caso, la guerra, la guerra civil que tanto nos suena…
cientos, miles, cientos de miles, millones de muertos…
cadáveres amontonados en fosas comunes, en arcenes de carreteras, en cementerios…
ni que decir tiene que esos cadáveres, serán los de nuestros familiares y amigos…
ese es el precio inevitable de hacer las cosas por las malas…