¡Tic, tac!, ¡Tic, tac! La deuda del Estado crece 40.983 euros al minuto por la brutal caída de ingresos

La recesión se ha llevado por delante, definitivamente, el superávit presupuestario; pero lo que es todavía peor, amenaza ahora con dejar una costosa herencia a las generaciones futuras. Los últimos datos indican que la deuda del Estado en circulación (de acuerdo con la metodología de déficit excesivo de la UE) se ha incrementado en tan sólo diez meses -de enero a octubre- en casi 18.000 millones de euros. O lo que es lo mismo, cada minuto el reloj de la deuda marca obligaciones de pago por valor de 40.983 euros. Se trata de una evolución espectacular que pone de manifiesto la velocidad a la que se están deteriorando las cuentas públicas, que en tan sólo doce meses (de octubre a octubre) han pasado de tener un superávit equivalente al 2,64% del Producto Interior Bruto a un déficit del -0,78%, lo que da idea del derrumbe presupuestario.



Las cifras del Tesoro indican que en los diez primeros meses del año el endeudamiento público ha crecido en nada menos que 17.592 millones de euros, lo que ha llevado los pasivos en circulación a cerca de los 300.000 millones de euros. En concreto, 298.049 millones, lo que significa la cifra más elevada (en términos absolutos) desde el año 2005. De esa cantidad, más del 80% está emitido en bonos y obligaciones y el resto en operaciones a corto plazo (inferiores a un año). Algo más de la mitad, está en manos de inversores residentes en España, y el resto está en poder de no residentes (principalmente procedentes de Francia y Benelux). De continuar esta evolución, en pocos meses se superará el récord en términos absolutos, alcanzado en 2002, cuando el endeudamiento público llegó a 307.610 millones de euros. En términos relativos, es decir, en relación al PIB, el Estado está todavía muy lejos de alcanzar los niveles registrados en los años 90.



En 1996 alcanzó el 67,6%, muy por encima del 36,2% de 2007, que marca el mínimo en más de dos décadas. Pero este año 2008, y a tenor de la evolución de las cifras, es muy probable que vuelva a situarse claramente por encima del 40%, toda vez que las necesidades de financiación del déficit van a requerir más de 30.000 millones de euros. Para 2009, las cosas se presentan todavía peores, toda vez que el desequilibrio presupuestario del conjunto de las administraciones públicas se situará muy probablemente cerca del 5% del PIB. Es decir, habrá que añadir a la bola de nieve de la deuda otros 50.000 millones de euros que tendrá que captar el Tesoro en los mercados para financiar el déficit. Es decir, el endeudamiento se situará ya muy cerca del 45% del Producto Interior Bruto.



El tipo medio de la deuda que se ve obligado el Estado a pagar por captar ahorro entre los inversores se situó en octubre en el 4,48%, ligeramente por debajo del 4,53% registrado un año antes, y con una tendencia claramente a la baja. La rentabilidad de las obligaciones a 10 años se situaba en el 4,47% en octubre y al comenzar este año -en coherencia con la relajación de la política monetaria- ha alcanzado el 3,72%, lo que supone un respiro para las arcas públicas. La vida media de la deuda se sitúa en 6,85 años, en línea con lo que ha sucedido en los últimos ejercicios, pero muy por encima de los registros de los años 90, cuando apenas se esperaban los tres años como media. Esto significa un desahogo para el Tesoro a la hora de articular su calendario de emisiones.

No habrá manera de parar este reloj.

http://www.prensaescrita.com/diarios.php?codigo=S&pagina=http://www.elconfidencial.com